La alimentación es la clave para llevar una vida saludable, si no seguimos una dieta adecuada, se corre el riesgo de dañar nuestro organismo, no sólo de enfermedades relacionadas con el sobrepeso o con el sistema cardiovascular, sino que otras partes del cuerpo se pueden ver igualmente afectadas negativamente si no comemos correctamente.
Una es el cerebro, uno de los órganos más importantes de nuestro organismo, sufre mucho con la ingesta de determinados ingredientes.
Los alimentos de los establecimientos de comida rápida, como pizzas o hamburguesas reducen la producción de dopamina, una sustancia que ayuda al sistema cognitivo, el encargado de nuestra capacidad para la memoria y el aprendizaje.
El consumo excesivo y prolongado de este alimento puede causar numerosos problemas cognitivos y afecta negativamente a nuestra memoria.
Las golosinas reducen la capacidad de aprendizaje.
Las papas fritas repercuten negativamente en la salud de nuestro cerebro aumentando el riesgo, en casos extremos, de sufrir un derrame o alzhéimer.
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